¿A
qué dedican el tiempo libre las personas mayores?:
Al escribir este artículo he visto el gran contraste que
hay entre quienes se encuentran en etapa
activa donde prima la sensación de ser pobres
de tiempo y la falta de cultura de
ocio que sufren quienes ya deberían estar disfrutando, justamente, de gran cantidad de tiempo libre.
Al aumentar la esperanza de vida, surge la necesidad entonces
de proyectar y definir qué es lo que
vamos a hacer en “los 30 años de gracia” que tenemos.
Para intentar ordenar el contenido, hablaré primero sobre
en qué utilizan el tiempo libre las personas mayores en España actualmente y
luego pasaré a unas reflexiones sobre cómo encarar nuestra propia vejez porque hay
un abismo entre ambas realidades.
Uso del tiempo en las personas mayores hoy:
Lo primero que me ha resultado sumamente curioso, es que
he encontrado un solo estudio (1) a nivel nacional con una
metodología robusta y aceptable. La segunda curiosidad es que el estudio es del
año 2007… Si alguien sabe de alguna fuente más actualizada, os agradecería que
me la hicierais llegar. Es cierto que sí existen informes regionales, o
parciales (uso del tiempo en residencias, por ejemplo), pero los he considerado
insuficientes para lo que pretendía estudiar.
En el estudio entran personas “no activas”, es decir, personas que ya no están trabajando
de forma remunerada, predeciblemente, mayores
de 65 años. Me ha gustado este matiz para no llamarlas “inactivas”, ya que
sí tienen un nivel de actividad alto y diversificado.
Hay cinco bloques
o dimensiones, en los que las personas
mayores utilizan su tiempo, los enumero por orden de importancia:
1. Actividades
de trabajo doméstico y familiar
2. Trabajo
voluntario y apoyo informal
3. TIEMPO LIBRE, que
es nuestro objeto de estudio y sobre
lo que me voy a centrar
4. Trabajo
profesional
5. Necesidades
biológicas
Tiempo libre:
Tenemos que tener en cuenta que las personas mayores de
HOY tienen un pasado de supervivencia.
Esta realidad reveladora hace que sean muchísimas las personas que simplemente no saben que es tener tiempo libre. Como
he comentado, esto choca frontalmente con nuestra realidad donde la mayoría de
las personas nos consideramos “pobres de
tiempo”.(2) Como diría el refrán “unos por mucho y otros por tan
poco.”
Estamos frente a una falta
de cultura de ocio hace que no
tengan habilidades desarrolladas para hacer frente a la nueva situación.
Los factores que más influyen en esto, además del pasado de supervivencia
mencionado, son: bajo nivel educativo y cultural
y bajo poder adquisitivo.
Vemos que uno de los grandes retos se
relaciona justamente con esta frase:
“La
capacidad de emplear con sentido el propio ocio es el grado supremo de la
cultura personal.”(3)
Como veremos más adelante, el tiempo libre debería ayudarnos a nuestra autorrealización, tiene que ser un tiempo utilizado
provechosamente y con un impacto positivo en nuestra calidad de vida.
Resumo a continuación los resultados del
estudio:
Dentro de Tiempo
Libre, se encuentran actividades de expansión, diversión, consumo cultural,
etc. realizadas bien sea en espacio público o privado. Veamos la descripción y
el detalle de cada una de ellas.
a) Espectáculos, diversiones y
relaciones sociales: Vida social, diversión y cultura y
ocio pasivo (descansar, reflexionar, relajarse, meditar o no hacer ¡nada!)
Destaca que el 70,2%
de los mayores de 65 años realiza alguna
de estas actividades durante una media de 2:25 horas al día.
Hay diferencias entre hombres y mujeres; los primeros pasan
más tiempo realizando vida social, diversión y cultura, las segundas, más tiempo
en ocio pasivo. En general se repite la dinámica que gira entorno a que los hombres son más “hacia afuera” y las mujeres
más “hacia dentro”. Claramente esta
es una diferencia que en las generaciones actuales (de baby boomers en
adelante), se irá reduciendo cada vez más (o al menos eso espero.)
De este apartado se obtiene la conclusión de que hay
mucha gente que utiliza su tiempo libre para no hacer nada, lo que refuerza la
idea de la no-cultura de ocio entre
nuestros mayores actuales. Aquí se disparan todas las alarmas porque esta
inactividad tiene consecuencias sobre el estado
de ánimo, el cuerpo y, en
definitiva, la salud integral.
El estudio considera como actividad cultural la asistencia
a centros comerciales y la posiciona como la actividad principal que
realizan las personas mayores. Personalmente no considero esto “cultura”, (la
explicación la dejo debajo en la reflexión). Le siguen en la lista el turismo, los paseos al campo, asistencia a
cine, museos, conferencias, etc, pero ya en niveles muy bajos. Lejos quedan
también asistencia a teatros,
conciertos, bibliotecas y espectáculos.
Otra actividad dentro lo que se considera actividad
social es hablar por teléfono, creo
que está demás decir que esta actividad es más frecuente entre mujeres que
entre hombres, ¿verdad?
También hay tiempo dedicado a visitar y recibir visitas, a pasear acompañado, charlas, comer fuera de
casa, etc. Recordamos que los hombres son más dados a actividades fuera de
casa que las mujeres y son estos quienes más asisten a clubs y peñas, juegos e ir al bar.
b) Deportes y ocio activo:
Deportes y actividades al aire libre, aficiones y juegos
No hace falta recordar la importancia de la realización
de ejercicio físico como principal medida preventiva. La buena noticia es que
este tipo de actividad está muy extendida entre las personas mayores: un 52,8% de ellos la realiza con una media
de 2:13 horas al día.
La actividad física principal es pasear, mucho más lejos quedan la gimnasia y la natación.
Pasear
puede parecer una actividad simple, pero es un buen indicador del estado de ánimo y del estado de salud en general de la
persona. Es evidencia de Calidad de Vida.
En cuanto a aficiones
y juegos, nuevamente surgen las diferencias entre sexos, siendo los hombres
los que en mayor proporción y por más tiempo los practican. Aquí entran juegos de azar, juegos de mesa y juegos de
salón. Este tipo de actividad ayuda a la agilidad mental.
c) Medios de comunicación y
estudios (actividades formativas)
Son muy pocas las personas
que realizan algún tipo de actividad formativa una vez superados los 65 años,
siendo solo el 0,9% del total
dedicándole una media de 2:19 horas al
día.
Personalmente, creo y estoy
convencida de que este será uno de los apartados que más va a cambiar en
nuestro futuro y que la formación permanente, nos acompañará más allá de
nuestra jubilación porque, recordemos, que la generación X y los Millenials son
las generaciones más formadas de la historia.
En cuanto al consumo de medios, vemos que el
estereotipo de que lo único que realizan las personas mayores es consumir
medios de comunicación, es falso. La realidad es otra. Sí bien es cierto que el
92,2% de los mayores lo hacen, no
hay mucha diferencia respecto a otros tramos de edad. Eso sí, lo hacen por más
tiempo con una media de 3:43 horas al
día ¿Qué os parece? (tengamos en cuenta que el estudio es de 2007 y que las
nuevas tecnologías han ampliado el espectro de lo que podríamos llamar “medios
de comunicación”)
El medio más consumido es la
televisión (89,9%), seguido de la lectura (22,4%) y siendo lo último radio y música (6,9%).
Es relevante destacar que la
verdadera variable que condiciona en el consumo
de televisión, es, sobre todo, el nivel socioeducativo. (a más bajo, más consumo de TV). La tele reduce la
sensación de soledad y requiere, a su vez, un nivel de comprensión más bajo que
otros medios
En la lectura
también incide mucho el nivel educativo
y es, a su vez, un medio más consumido por hombres que por mujeres.
Personalmente me han sorprendido mucho estos datos porque
están muy lejos de lo que yo me imaginaba. Espero que tú también hayas
descubierto algo nuevo.
Reflexiones para nuestra vejez:
Después de ver el estudio, me invadió una cierta tristeza
y me ha hecho preguntar: ¿Esta es la vejez que quiero tener? Mi respuesta es
definitivamente NO.
Y cojo aquí algunas cosas que he leído en el libro “La vida de 100 años”(2) que
nos dan una perspectiva diferente de cómo debemos pensar en nuestra vejez y el
uso del tan ansiado tiempo libre:
·
El tiempo es inherentemente igualitario e inherentemente
escaso, con lo cual, una vez más, está en nuestras manos cómo lo
utilicemos.
·
A pesar de que objetivamente trabajamos menos
horas que en el pasado, la sensación de ser “pobres de tiempo” no nos abandona.
·
Cobra relevancia entonces el poder utilizar nuestro tiempo de manera útil.
·
El problema real es como usar nuestra libertad una vez eliminadas las ataduras vinculadas a
la etapa laboral activa.
·
Cuanto más valoremos lo material, más dedicados a trabajar y a generar activos económicos estaremos,
con lo cual, prolongaremos la sensación de falta de tiempo.
·
A mayores niveles de renta, mas alto el coste
del ocio, o sea, más presión.
·
Tenemos que plantearnos realmente qué es el ocio, ¿son solo cosas
“divertidas”?
·
Hay un aumento brutal de la industria del ocio, sobre todo con
fines puramente comerciales. Esta oferta exagerada, hace que “embutamos” el ocio en bloques de tiempo cada vez mas cortos, lo cual alimenta aún más
la sensación de “no tener tiempo
suficiente”.
·
En el esquema donde ya no hay vida de tres
etapas, debe haber espacio para el ocio
a lo largo de toda nuestra vida y no exclusivamente durante la vejez.
·
Esto provoca que tengamos que tomar
conciencia para reasignar el ocio pasando de la recreación a la re-creación.
·
Tenemos que dedicar tiempo al desarrollo de activos intangibles, que son la familia y los amigos, las competencias y
los conocimientos y la salud y la vitalidad.
·
Esto requiere necesariamente a desvincular el ocio con el consumo.
·
El ocio
se ha privatizado y regularizado, (como hemos visto en los resultados del
estudio anterior) y la clave estará en cambiar
la forma en la que se usa el ocio.
Entonces, para concluir:
o
Más
que CONSUMIR TIEMPO, hay que INVERTIR EN INTANGIBLES
o
El tiempo libre nos da la oportunidad de desarrollarnos completamente como
individuos, tener un propósito, un sentido.
o
Tenemos que tener una agenda personalizada del ocio de acuerdo a nuestros valores, gustos
y necesidades y no regida por la oferta privatizada de entretenimiento.
Si quieres profundizar, te dejo debajo las fuentes.
Hasta la próxima!
Fuentes consultadas:
1.Perfiles y tendencias. Uso
del tiempo entre las personas mayores - Observatorio de Personas Mayores –
marzo 2007
2.“La vida de 100 años” – Lynda
Gratton & Andrew Scott – (Versus)
3.Russel, 1951: 180
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